¿Qué diferencia hay entre CBD y THC?

CBD vs THC: Conceptos básicos

Es fundamental comprender que tanto el CBD como el THC son cannabinoides, lo que significa que son dos de los más de 150 compuestos químicos que se han identificado en la planta de cannabis. Estos cannabinoides interactúan con los receptores presentes en el cuerpo y el cerebro humano a través del sistema endocannabinoide.

Junto con los terpenos, los cannabinoides son los componentes de la marihuana que generan efectos físicos y mentales, como la relajación, la risa y la reducción del dolor y el estrés.

De todos los compuestos químicos del cannabis, el CBD y el THC son los más conocidos debido a que han sido los más investigados por la comunidad científica hasta la fecha. De hecho, el Doctor Raphael Mechoulam (profesor de química medicinal en la Universidad Hebrea de Jerusalén (Israel)) fue quien los aisló y sintetizó por primera vez , lo que ha permitido que sean ampliamente estudiados.

¿Qué es el CBD?

El cannabidiol, conocido como CBD, es uno de los compuestos más populares del cannabis debido a sus propiedades terapéuticas. A diferencia de otros componentes, el CBD no produce efectos psicoactivos ni afecta nuestras capacidades cognitivas. De hecho, el CBD es capaz de contrarrestar los efectos psicoactivos del THC.

Este cannabinoide ha ganado reconocimiento gracias a sus propiedades anticonvulsivas, lo que lo convierte en un principio activo efectivo para reducir los ataques epilépticos en algunos pacientes con epilepsia refractaria.

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¿Qué es el THC?

El tetrahidrocannabinol, también conocido como THC, es el compuesto más conocido del cannabis y es el responsable del efecto psicoactivo que produce. A pesar de que actualmente el CBD ha ganado popularidad, el THC sigue siendo la estrella del cannabis y la razón por la que ha sido prohibido en muchos países.

Sin embargo, los efectos del THC van más allá del «colocón». Este cannabinoide posee importantes propiedades narcóticas que pueden ayudar a reducir el dolor crónico en pacientes, además de ser un aliado eficaz para estimular el apetito y combatir las náuseas, lo que lo convierte en una opción recomendable para personas en tratamiento de quimioterapia.

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¿De dónde salen el CBD y el THC?

Tanto el CBD como el THC son cannabinoides que se obtienen de la planta Cannabis Sativa, más conocida como marihuana. Sin embargo, mientras que el CBD también puede encontrarse en la planta de cáñamo, una variedad cercana del cannabis, el THC solo es producido por la planta de cannabis.

Tradicionalmente, el cannabidiol solo se encontraba en el cáñamo, pero debido a la creciente demanda, los cultivadores han trabajado en el desarrollo de plantas de cannabis que produzcan CBD. Como resultado, hoy en día es común encontrar plantas de marihuana que no contienen niveles significativos de THC, pero sí altos porcentajes de CBD.

A pesar de que ambas plantas pertenecen a la misma familia, hay una gran diferencia entre ellas en cuanto a los niveles de estos dos compuestos.

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¿Cuál es la diferencia entre el cáñamo y la marihuana?

Estas dos plantas pertenecen a la misma familia, Cannabis Sativa, pero se diferencian tanto en su morfología como en su composición.

La principal diferencia radica en que el cáñamo no produce THC ni ningún otro cannabinoide psicoactivo, sino que solo produce CBD. Por otro lado, la marihuana produce más de cien cannabinoides, incluyendo THC. El cáñamo es más alto, más resistente y tiene menos ramificaciones, mientras que la marihuana es más compacta, más baja y con muchas más ramificaciones.

El cáñamo se ha utilizado tradicionalmente para la producción de fibra (en la industria de la construcción y textil) y semillas (en la industria alimentaria), mientras que la marihuana se cultiva para obtener cannabinoides.

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¿Cómo afecta el CBD y el THC al cuerpo?

Tanto el CBD como el THC interactúan con el sistema endocannabinoide humano, pero sus efectos en nuestro cuerpo difieren significativamente. Aquí te presentamos las princnipales diferencias:

A diferencia del THC que afecta partes específicas de nuestro cerebro, el CBD no modifica nuestras habilidades mentales. Esta es la principal conclusión en cuanto a cómo afectan ambos cannabinoides en nuestro cuerpo: si consumimos CBD, nuestro funcionamiento mental permanece igual, mientras que si consumimos THC, se verá alterado.

El CBD tiene efectos tales como relajación muscular, disminución de convulsiones y reducción de la ansiedad, entre otros. Por otro lado, el THC es conocido por sus efectos psicoactivos, así como por sus propiedades narcóticas, relajantes y antiinflamatorias.

Importancia del efecto séquito

El efecto séquito hace referencia a que los compuestos del cannabis tienen un efecto más potente cuando se consumen juntos en lugar de separados. Esta teoría se basa en la sinergia entre los distintos principios activos de la planta, que interactúan y se potencian entre sí.

De acuerdo con este principio, se sugiere que el consumo de CBD no debe ser aislado, sino combinado con otros cannabinoides y terpenos presentes en la planta para aumentar su asimilación por el cuerpo.

Nota: Un ejemplo de cómo funciona este efecto es cuando se consumen cannabis con niveles de THC y CBD. Como el CBD actúa como antagonista del THC, consumirlos juntos puede reducir los efectos psicoactivos del THC. En resumen, los compuestos del cannabis trabajan mejor juntos que separados.

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Situación legal del CBD y el THC 

La situación legal de los cannabinoides varía según el país en el que nos encontremos. Antes de diciembre de 2020, la mayoría de los países seguían la Convención Única sobre Estupefacientes de Naciones Unidas de 1961, que clasificaba al cannabis y sus cannabinoides en la Lista IV de sustancias prohibidas, al mismo nivel que la heroína.

Sin embargo, en 2020, la Comisión de Estupefacientes de Naciones Unidas, en línea con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, reclasificó el cannabis y votó a favor de su exclusión de esa lista, siempre y cuando se use con fines medicinales.

Esta nueva percepción ha generado esperanza en la comunidad científica, ya que podría permitir una mayor investigación sobre los cannabinoides. Sin embargo, esto no implica cambios en la legislación de cada país. La legalidad del cannabis y de sus cannabinoides seguirá siendo determinada por las leyes de cada lugar.

Situación legal del cannabis en Europa

En Europa, la mayoría de los países prohíbe el cultivo, venta, transporte y consumo de cannabis con niveles de THC superiores al 1%.

Sin embargo, en algunos países como Suiza e Italia, se permite el cultivo, venta y consumo de cannabis con niveles de THC inferiores al 0,5% y altos niveles de CBD. La legalidad del cannabis también varía según su uso (medicinal o recreativo) y el método de consumo (flores, tinturas, extractos, entre otros).

Aunque la situación legal del cannabis en Europa es compleja y extensa, abarcando múltiples países y leyes, profundizar en este tema excede el alcance de este post. No obstante, sí que hablaremos de la situación legal de España.

Situación legal del cannabis en España

En España, el consumo y la tenencia de cannabis para uso personal en espacios privados no está penado por la ley, pero su venta y distribución sigue siendo ilegal. La ley establece que el cultivo, la elaboración y el tráfico de drogas son delitos graves, y la posesión de grandes cantidades de cannabis puede ser considerada como tráfico.

Sin embargo, en 2015, el Tribunal Constitucional de España sentenció que la sanción penal del consumo y la tenencia de cannabis en lugares públicos o su venta a terceros era inconstitucional, aunque se mantiene la sanción administrativa.

En cuanto al uso medicinal, en 2019 se aprobó la legalización del cannabis medicinal en España, permitiendo su uso en casos específicos y bajo prescripción médica. Los pacientes pueden acceder a productos elaborados a partir de cannabis y sus derivados, como aceites, cremas y otros productos farmacéuticos, siempre y cuando se hayan agotado las opciones terapéuticas disponibles y estén prescritos por un médico especialista.

Por otro lado según la legislación española, el CBD no está incluido en la lista de sustancias prohibidas y no se considera una droga. Sin embargo, su venta y comercialización está regulada y se requiere una autorización previa del Ministerio de Sanidad para vender productos que contengan CBD.

Además, los productos que contienen CBD deben cumplir con ciertos requisitos legales, como no contener más de un 0,2% de THC (tetrahidrocannabinol), el principal componente psicoactivo del cannabis, y deben estar etiquetados adecuadamente para informar al consumidor sobre el contenido del producto.

¿Qué hay que recordar sobre el CBD y el THC?

En la actualidad, varios países han aprobado el uso medicinal de ambas sustancias, especialmente del CBD. No obstante, es importante no subestimar sus posibles efectos. Para garantizar un uso seguro, es esencial consultar a un médico de cabecera o a un especialista en cannabis cualificado.